Camino de Santiago 2019 Gen ’16

14 junio 2019

El Centro Juvenil Amics, de nuevo, caminó hasta Santiago.

Por

Emilio Vivancos (Generación 16).

“Camina dejando huella”
21 de abril, 6 de la mañana, en la puerta del 188, 27 guerreros y guerreras, junto con nuestros monitores preparados para una dura semana, a pesar de ya haber sufrido la primera baja, de nuestra monitora Afri Carrasco. Todos la llevamos presente en el camino, y nos dio fuerzas durante este.
Antes de partir hacia nuestro primer destino, hicimos una pequeña oración y se nos hizo entrega de nuestras bragas personalizadas y el parche con el lema que nos acompañó todo el camino: “Camina dejando huella”. Las otras dos cosas que nos acompañaron todo el camino, fueron nuestra canción lema “Sale el Sol” y la cuenta de Instagram @chepuditos, de la que todos fuimos todos participes y mediante la cual nos fuimos comunicando y dejando videos y fotos graciosas durante todo el camino.
El viaje hacia Sarria ya comenzó con sonrisas de oreja a oreja de todos, ya que estábamos ilusionados por lo que nos esperaba. Había gente viendo pelis y series, otros cantando, otros jugando a juegos de mesa y alguno que otro durmiendo, pues teníamos un agotador viaje de aproximadamente 12 horas.
Al llegar a nuestro primer albergue, fue el único día que nos dieron las fuerzas para ver un poco el pueblo y la zona en la que estábamos alojados, y bueno… de hacer un poco postureo también. No sabíamos lo que nos esperaba.
1ª Etapa Sarria-Portomarin (22,4km):
Pese a ser la primera etapa, personalmente la considero la segunda más difícil, porque se arranca desde parado, y no éramos prácticamente conscientes de la distancia que nos esperaba, ni de los desniveles que había; aunque no fuera ni de lejos el día con más kilómetros, ni el día que llevábamos más carga muscular.
Una vez llegamos al albergue, se notaba que realmente que no había sido tanto y que realmente solo era el principio. Además, ese fue el día que más disfrutamos en el albergue, ya que era todo para nosotros y lo aprovechamos jugando a juegos de mesa y a las tinieblas.
2ª Etapa Portomarin-Palas de Rei (25km):
Poco a poco íbamos notando el cansancio y empezaba a pasar factura, pero siempre intentábamos estar lo más alegres por y para nuestros compañeros y siempre manteniendo la fe de que todos juntos íbamos a lograr nuestro objetivo.
Climatológicamente este fue el mejor y el peor día, porque pudimos ver nevar estando casi en mayo y además para algunos era la primera vez que veían nevar. Pero por desgracia, el frío que teníamos, no nos los quitamos hasta después de la calentita y gloriosa ducha que nos pegamos.
3ª Etapa Palas de rei- Arzúa (28,8km)
Por fin llegaba el ecuador de nuestro camino, quedaban cada vez menos kilómetros, pero de su mano llegaba la etapa más dura física y mentalmente. Es la más larga y conocida y de la que todo el mundo te advierte antes de hacer el camino. Es famosa por sus cuestas que son apodadas de infinidad de formas: El Rompepiernas, El Rompepies, El Rompetobillos, La Cuesta Interminable, la ¿Cuánto queda?, la ¡Ya veo el final!, pero no, …
Otros compañeros y monitores del Centro Juvenil, nos habían advertido de esta etapa, pero al final gracias a que unos a otros nos fuimos ayudando, conseguimos superarla todos unidos. También cabe destacar el almuerzo de pulpo “á Feira” que tomamos y que nos dio un montón de fuerzas a mitad de la etapa.
Ese fue el día en el que más disfrutamos quitándonos las zapatillas y poniéndonos las chanclas al llegar al albergue, y también en el que más valoramos la compañía de nuestros compañeros, debido a que nos dimos cuenta que, seguramente sin su presencia a nuestro lado y el pasar los momentos más difíciles juntos, no habríamos logrado llegar hasta allí, ni conseguiríamos llegar a Santiago. Fue un punto de inflexión en el que descubrimos el verdadero significado del Camino, que lo importante no era llegar, si no hacerlo todos juntos, y también nos dimos cuenta de lo afortunados que éramos de hacerlo con las personas con las que estábamos haciéndolo, a las que a día de hoy considero mi SEGUNDA FAMILIA.
4ª Etapa Arzúa-Pedrouzo (19,1km):
Penúltima etapa, ya no nos quedaba nada, fue el día que más diversos y distanciados fuimos unos de otros, ya que había algunos que iban muy rápido por la emoción de que casi estábamos en Santiago y otros que aprovecharon para cansarse menos yendo más lentos y llegar más descansados a la capital.
Llegaras más pronto o más tarde, allí estaban tus compañeros, esperándote, felices por ver que llegáramos todos, y estuvieras más o menos cansado eso se contagiaba y no notabas el agotamiento.
Este, es el día en el que más presentes estuvieron los masajes, ya que todos queríamos intercambiar masajes con otros para el dolor de espalda o, simplemente para relajarse, también usamos “La Pelota de Tenis” para descargar los gemelos.
También, fue el día en el que más unidos acabamos, por la reflexión que hicimos, en la cual, a través de papelito con una flecha amarilla, se lo entregabas a alguien en forma de señal de perdón o de gracias.
5ª Etapa Pedrouzo-Santiago de Compostela (20km)
El último día teníamos una mezcla de sentimientos, estábamos tristes porque se acababa la experiencia, y alegres porque sabíamos que todos unidos habíamos e íbamos a cumplir nuestro objetivo de caminar dejando huella.
Este día, caminar apenas suponía esfuerzo, caminabas por intuición, las piernas se movían solas mientras cantábamos, bailábamos y nos divertíamos. Esta etapa fue una auténtica fiesta.
El momento en el que entramos a la Plaza del Obradoiro, todos juntos, en fila y agachados haciendo referencia a nuestro apodo “Chepuditos”, fue de las mejores sensaciones de toda mi vida.
Una vez allí, visitamos la Catedral, besamos al Santo y nos hicieron entrega de La Compostela. También, en Santiago tuvimos una misa oficiada por el Salesiano animador y al día siguiente emprendimos el viaje de vuelta a Valencia.
Puedo decir con certeza que esta es una de las mejores experiencias que voy a tener en mi vida y que no habría sido así, si no hubiese sido con la gente que me ha rodeado durante este. También cabe destacar que el Camino te lo podrán contar mil y una vez, pero cada Camino es único para cada grupo y para cada persona y es una experiencia que todo miembro del Centro Juvenil y toda persona debería vivir.

Galería de imágenes

También te puede interesar…

¡Campeona!

¡Campeona!

Nuestra alumna Carolina Yuste gana el Campeonato de España de Promesas de Atletismo.Editorial.Carolina se proclamó...