El alumnado de ESO1 disfruta de su primer viernes alternativo del curso.
Por Editorial.
Más de cien alumnos y alumnas de ESO1 se han juntado este viernes 21 en el colegio para disfrutar del primer viernes alternativo del curso. En esta ocasión se trataba de jugar a juegos famosos pero de una manera diferente, ya que estos habían sido agrandados.
De este modo, los barcos del juego de hundir la flota han pasado de ser simples dibujos a adquirir unas dimensiones importantes. El Twister también ha aumentado su tamaño y permitía que más de quince personas jugaran a la vez. Otros juegos que han tenido un papel importante esta tarde han sido el Pictionary, el Preguntados, el Tabú, el Kahoot y el Password.
La tarde ha transcurrido fenomenal. Un total de 24 grupos han participado en la actividad. A medida que finalizaban un juego, se les otorgaba una serie de puntos en función de lo bien que lo habían hecho.
Desde luego, las risas y la alegría han sido las verdaderas protagonistas de esta jornada vespertina. Los rostros reflejaban la ilusión por poder disfrutar con amigos de esta experiencia inolvidable. Sin embargo, también ha habido un momento final de tensión.
En ocasiones, el destino es caprichoso y así lo ha demostrado cuando todos los grupos se han reunido en el salón azul para realizar el recuento final de puntos. “Tenemos un cuádruple empate”, anunciaba Gerardo desde el micrófono. Las caras de perplejidad lo decían todo. Se necesitaba realizar un desempate y obtener un ganador final, pero ya habían jugado a todos los juegos. Bueno, a todos menos uno, el gran juego final: piedra, papel o tijera. Un representante de cada equipo ha subido al escenario para luchar por la victoria. Se han jugado dos semifinales y una final al mejor de 3. Como resultado final, un equipo conformado por alumnos de 2ºESO se ha alzado con la victoria tras remontar 2-3 en la ronda final.
Han sido muchas las emociones vividas durante este viernes alternativo, pero la más destacable ha sido la alegría de nuestros jóvenes estudiantes. Siguiendo el modelo de Don Bosco de aprender jugando, los alumnos han pasado una tarde maravillosa que seguro ha dejado muy buenos recuerdos en la memoria.
